La residencia canina Manterola cuenta con un veterinario durante las 24 horas del día. Este veterinario se hará cargo de las pequeñas incidencias que puedan producirse durante la estancia de las mascotas en la Residencia, tales como: pequeñas suturas, roces, catarros, males gastrointestinales, otitis o conjuntivitis.
Cuando los incidentes sean de mayor consideración, como pueden ser, traumatismos, roturas, lesiones oculares o enfermedades propias del animal, la residencia canina Manterola, se encargará de trasladar al animal a su clínica veterinaria y hacer todo el seguimiento que requiera durante su estancia en el hotel, pero no se hará responsable de la parte económica de los tratamientos, medicamentos, ni de las operaciones necesarias a realizar.
En caso de que el propietario del animal no atienda al teléfono en ninguno de los contactos cedidos a Manterola, el animal será trasladado a su clínica veterinaria, haciéndose responsable el propietario de la consulta y de los posibles tratamientos necesarios.